De recuerdos futuros

Anoche mi roomie me convidó a tomarme alguito en un parche ciertamente bien juvenil. A eso de las tantas, cuando ya no había más cabida para el techno ni la salsa ni el rap ni el reguetón, sino para Julio Jaramillo y Olimpo Cárdenas y, bueno, Mis ojos lloran por ti, a uno del grupo se le ocurrió poner Mi viejo de Piero. Un re-temón. Pero al final resultaron dedicándomela a mí. Lo cual es mi primera vez asumiendo ser un "querido viejo que ahora va caminando lento como perdonando el viento". Esos recordatorios curiosos de para dónde van los ríos y de en dónde se estancan las aguas.

1 comentario:

José A. García dijo...

Con amigos así quién necesita enemigos...

Saludos,
J.