Yo que amo con el amor de la nada

Yo que amo con el amor de la nada
Yo que amo con el dolor de la sombra
Yo que camino el camino del olvido
Una vez cuando 'vez' ninguna fue
Aquella hora cuando nadie fue
Tú que afuera aguardas
por el destino de las rocas
y que a nadie llamas
sino a la muerta aurora
o la sangre muerta
Cada mañana que es mañana
Cada día ido que es hoy
Siempre hoy
Atascados en el tiempo congelado
nos abrazamos en la dicha
y tras la nostalgia
porque espejos somos
de un universo oscuro
que ya no ve las lágrimas,
que a nadie su lamento escucha
Infinitos en nuestra esquina sola
se derrumban las montañas,
se evaporan los últimos ríos
Hoy que se apagan los gritos
y que vas con mi suspiro
invisible, cálido y frío