Ha visto la primera sonrisa. Ha visto los primeros ojos. La primera piel ha deshecho todos los temores.
Es la lengua que describe un mundo perdido en cada agua. Son las manos que tocan el pasado que no entienden. Es el futuro cercano que ya se irá.
Llega la lluvia con la primavera, para irse el mismo día que saluda.
Y se ha ido, mientras en la silla espera la ansiedad.