Mañana.


Ayer me llovió adentro.
Y ahora llueve afuera mientras me llueve adentro.
Seguirá cayendo lo que cae.
Me desmayo dormido, el cuerpo se me cae.

Mientras tanto pedaleo exhausto en este húmedo infierno.
Tierra de nadie, tierra mía en la que me encuentro.

¿Qué será?
Lo que no ha sido.
De lo que he carecido.
De lo que me he perdido.

Todo eso que nunca a tiempo llegó.

Como la mañana fría y la noche fresca, el sol radiante y el azuloso cielo.

Haciéndose cuevas, los ojos; y el cuerpo, encierro.

Salpicando las piedras de quien se hunde mientras se hunde. Afilando el escalpelo.

De todo lo que callo, siempre es esto en lo que yerro.

De rama en rama, de pino en pino.


Afinando la idea al que, de tiro y saque, ya casi le atino.
Afilando el lápiz que traduce y derrama justamente lo que afino.
¡Finalmente! No más de mis dudas seré un simple adivino.
Pues he encontrado en la bruma el relato perfecto, el cuento Divino.

Ah Eureka. Saliste finalmente por las aguas de este remojo salino.
Cuando te pensaba perdido en la boca de algún libro cerrado y clandestino.

Ahora vestirme podré de orgullo, de roja organza, de negro lino.
Que se destape la cerveza siniestra, la verde pradera y el dulce vino.
Que se vista de orgullo cada esquina mugrienta y cada espejo de mi camerino.
Pues al parecer se viene la dicha y las carnes furtivas y los juegos de casino.

¿Es acaso esta la última letra, el último párrafo, la última pincelada de mi Destino?
Lentas se irán, sin embargo, las risas. Y apenas dejarán un recuerdo fino.
Que ingrato he sido con la Gracia suprema. Ladrón de canciones ajenas. Mezquino.

Qué ingrata es esta vida, apenas sonríe la rata, se aparece el hambriento felino.

Al otro lado de este lado.



Sopla y sopla. Llueve y llueve.
Triste, triste.

Me hundo.

Mientras

empantanada camina la respuesta.

Que anda vacía.

Cuando llueve, lo que llueve.


Me ato la boca con los ojos. Mientras te lloro.
Me sumerjo entre aceites y ácidos. Mientras te olvido.

Te has ido con el vapor del silencio.
Y yo me quedo: en el silencio de un último suspiro.

The Call.


Is this The Gold?
Is this what you hold?
In spite of this silence and this perpetual cold.
"Read it": he told.
"Let's first unfold
the whole book. And then read it all.
Open it". And he started to crawl.

I was scared. Then I did it.
I read it.
Word by word.
Bit by bit.
I cried, I screamed and finally I quit.
After all,
I realize. Now I know,
that it can be lost, as life, as cold, as all,
it can be simply sold.

Last 5 Stunden: Mor-ning. Mor-phin. Por-fin.


Now the moon is alone. Y llora cada una de sus noches sin sol. Tirita. And alone she goes through its own universe. Resquebrajando su propia sombra de lo que ya no fue. While I write and let its lights be with me. Show up. Arrive. Quédate aquí.

Jabón.


Pero claro, tenía que ser así. ¡Qué más habría podido esperar!

Hundiste la última llama de esperanza que me quedaba en el lavaplatos mientras limpiaba la comida del desayuno que te había servido.

Bien pudo ser en la ducha, pudo ser en alguna tina (y quién sabe en dónde porque no tenemos una), pudo ser en ese vaso de agua que siempre pones debajo de la cama para ahuyentar espantos. Que no sé cuáles, los míos quisiera pensar pero ya te habrías ido si fuese efectiva (el agua) o efectivo (el vaso). ¿Se requieren ambos?

¿Por qué la apagaste? ¿Porque eliminar ese rastrojo de luz divina que nos alumbraba en las noches mientras tomábamos nuestra aguadepanela y hablábamos de cómo se habían empantanado las calles con este invierno? ¿Recuerdas? Nunca te gustó con queso. Yo siempre quise más pan pero temía que se acabara.

Recuerdo el día en que amenazaste con ponerla a nadar en el inodoro. Y te respondí que no me importaba, que hicieras lo que te diera la gana...mientras lloraba y rogaba a todos los dioses que rigen el camino de las tuberías que si llegabas a hacerlo la mantuviera viva y la reapareciera escondida en un recipiente patas arriba.

Como en nuestras épocas en el laboratorio.

Pero le pusiste el dedo húmedo encima justo en el momento en que intenté cerrar la llave y protejerla con la cáscara de medio huevo. Y ahora yace aburrida sólo la mecha.

¿De qué estará hecha esa mecha?

Negra. Peluda un poco quizás por el contacto con el agua. Envuelta entre fríjoles del almuerzo de ayer y con algunos pedazos de papaya y mango del mercado de hoy. Apenas hace un rato cuando sonreiste y yo te sonreí. ¿Me sonreiste?

El día en que la trajiste yacía como una pájarita escondida en una caja de cartón. Tan pequeña. Tan sensible. La envolví con uno de los limpiones pero tuve miedo que se quemara y decidiera extenderse al mantel que tu mamá nos regaló la anterior Navidad.

Parecía mirarme pero estaba exhausta y hambrienta. La pasé entonces al plato de las ensaladas y le dejé algunas servilletas para que pudiese jugar a incendiarse y le dejé cera del velón de Santa Marta para que aliviara un poco el malestar. Todos los días desde entonces la había saludado en las mañanas mientras dormía. Era algo perezosa y siempre despertaba pasadas las diez.

¡Estaba dormida! Y, ahora, después de tu previsible despojo y crimen, quedará por siempre en ese sueño infinito de las altas temperaturas en donde todo se funde. El amor con el odio. La locura y la cordura. La humilidad con la avaricia. El miedo y el silencio. En la argamasa pegajosa del infinito.

¿Planeabas hacerme feliz y luego apagarme? ¿Era tu deseo realmente verla ahí: indulgente y muda? Pensé que también la querías a tu lado.

Y creo que ya ha sido suficiente, creo que esta ha sido nuestra última comida juntos, nuestro último café y creo que ya he desperdiciado mucha agua lavando tus -ahora- recuerdos.

He de cerrar la otrora válvula y encontrar mi pequeña llama esperándome en algún otro corazón.

Montag.


Me voy a ese patio en el que nada encuentro,
en el que nada queda ya. Ese afuera que me duele adentro.

Ya nada es mío: me digo. Y me respondo: ya nada es nuestro. En el centro
de esta fascinerosa ilusión me destierro. Me lloro y me reencuentro.

Todo se echó a perder. Todo se desgastó. Ya nada tiene encanto.
Así limpio la cruz vieja y me padezco y me sufro entretanto.
Así me quedo de pie frente a este frío y frente a este llanto.

Llueve. Llueve la tristeza que ahora sí aparece y alumbra.
Sumergida en esa mentira cruel que es la vida y su penumbra.

Ah cómo me engañaste con tu fruta primera, sileciosa condena. Culebra.
Pues no me queda más que este rastro de lo que fui, que esta delgada hebra.

Tan sólo espero que el sueño profundo sea aquel soplo divino que a la agonía sacuda.
¡Que venga a mí la final condena, que venga a estas manos, que ya a mí acuda!

Y que limpie de todo mañana este irrespirable incienso y esta tenebrosa duda.

Loud.


Estoy buscando el altavoz con el cual quisiera gritarte. Pero tengo tantos y es tan difícil elegir. Sobretodo ahora que no estás. Y mi grito sale ahogado. Sale muerto.

Around some kind of beat.


Sit y seat.

Riman.

“Sit on a seat”
Sentarse en un lugar, ya que:

Seat:
place to sit. Something for sitting on, e specially something designed for this.

“Seat on a sit”
Sentarse en el tiempo, ya que:

Sit:
time spent being seated. A period of being seated

Pero sentarse en algún sitio del tiempo asumiendo que el tiempo es un lugar es:
Sit on a seat.

Conclusión:
En el tiempo es posible sentarse.
Sentarse: como me siento en el suelo. Del modo en que me siento en el suelo.
(No referente a cómo me siento -sentimentalmente- sentado en el tiempo o sobre el tiempo.
Si no sobre cómo me siento físicamente en el asiento del lugar llamado tiempo)

Sentar de sentar el cuerpo.

Ahora bien,
¿Qué es dar por sentado?
Dar por sentado es tener completamente claro aquello que intenta entenderse.
No obstante, si sé de alguien que está sentado en el asiento, yo puedo: dar por sentado.
Es decir, puedo apostar que ese alguien está sentado en el asiento.

(“Sentar” no referente a dar por sentado un acontecimiento)
Es decir, no "un acontecimiento sentado".
Y este último “sentado” no "sentado en un asiento".
Y este último “asiento” no "aceptar".

“Acepto” de "yo asiento cuando al algo preguntarme acepto".
Si se me pregunta si esto que acabo de escribir yo entiendo pues asiento.

¿Tú esto entiendes?
Si.
Por ello asientes.

Que se dé por sentado que es posible sentarse en el asiento del tiempo.

Seat sounds like sit.

Me llaman.


Me dejé conectado.
Esperando aquel sonido me viene a este escritorio.
Esperando leerte.
¿Te leeré?
Te olvidaré.

Te escucharé. Quizás.

Olvidar te quiero. Tener te quiero.

Quizás varias. Quizás muchas veces tener te quiero.

Pero al menos,

una vez más.

From my body, today only my bones.


How can I know
if (when) there's something going on?
Say something, say it right now.
Cause I can't or don't know how.
I'm too afraid. Too new in this crowd.
So, ¡come on!
Don't make me go down,
don't let me think that everything is lost
and I'm finally done.

De cortísimo plazo.


Entre otras. Debo decirte esto. Me he escapado tanto de mí mismo. He huido tanto de ti.
Entre otras.
(Silencio)
"Ya se me olvidó": me digo.
Te miro. Me despido.
Y me voy.

Ardiente va el agua. Por allá.


Yo sí que vivo...del Puente pa'llá. Y si estuviera en Juanchito, me pediría un guarito.